A continuación, una serie de beneficios que supone el teletrabajo:
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* Mayor autonomía – Esta es probablemente la ventaja más obvia.
La libertad para que el trabajador pueda organizar sus tareas permitiéndole asumir responsabilidades, tomar decisiones y tener horarios flexibles.
* Reducción del estrés – El poder tener control sobre su horario hace que el trabajador se estrese menos, ya que, por ejemplo, si un día necesita hacer o ir a algún sitio puede hacerlo y trabajar más tarde. De hecho, según datos del CEDyAT, los empleados que trabajan en remoto tienen un 50% menos de desgaste laboral.
* Ahorro de costos y tiempo – Llegar al lugar de trabajo puede suponer para una persona varias horas al día. Al teletrabajar se ahorra ese tiempo pudiendo dedicarlo a otras tareas.
* Aumento de la productividad – Un trabajador más feliz y saludable es más productivo. La flexibilidad del teletrabajo hace que los empleados tengan un mayor equilibrio entre su trabajo y su vida personal, y esto aumenta la satisfacción profesional y fomenta la creatividad.
* Reducción del ausentismo y mayor compromiso – La flexibilidad horaria reduce considerablemente las ausencias. Esto se debe a que, si lo necesitan, los trabajadores pueden atender otras obligaciones sin tener que ausentarse del trabajo, ya que podrán realizar su trabajo más tarde. A esto se le suma que el trabajador contrae un mayor compromiso con la organización.
* Reducción de los gastos – La empresa puede ahorrar en material de oficina, así como gastos de luz y demás suministros.
El teletrabajo supone un ahorro para las organizaciones de hasta un 30% en costos de infraestructura.
* Cuida el medio ambiente – Al no ser necesario viajar en transporte público y/o privado genera una disminución de los desplazamientos que se traduce en una reducción del tránsito y de las emisiones de gases contaminantes.
