El escándalo del «vacunatorio VIP» que se montó en el Ministerio de Salud generó un importante malestar en la sociedad y el gobierno de Alberto Fernández buscará ahora restituir la confianza de la gente en la campaña de vacunación.
Rápida de reflejos, la flamante ministra de Salud, Cara Vizzotti, ya se encuentra en la Casa Rosada para reunirse con el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero.
El tema de conversación será principalmente las distintas políticas y gestiones que comenzará a hacer la cartera de Salud para recuperar la confianza de la sociedad en el Gobierno respecto a la campaña de vacunación.
Con la economía fuertemente golpeada por los acelerados avances de precios, los salarios atrasados contra la inflación y el rebote económico posterior a la pandemia muy tenue, la vacunación masiva era la gran apuesta del Gobierno para la campaña electoral de este año.
En ese sentido, lo sucedido en la cartera de Ginés González García fue visto puertas adentro del Gobierno como un «tiro en el pie» y aseguran que la oposición buscará aprovechar este impacto para que el tema dome la agenda pública.
«La oposición quiere instalar que había una gran estructura paralela de vacunación VIP por la que pasaban funcionarios, empresarios y otras personas. Eso es falso y tenemos que aclararlo aceptando nuestros errores», indicaron a NA fuentes cercanas al presidente Fernández.
Además, aunque circulan por redes sociales varias listas apócrifas respecto a quiénes se darían la vacuna de forma paralela, utilizando sus buenas relaciones con el ministro González García, hay una fuerte sospecha de que existen más vacunados VIP y los nombres no se reducen al periodista Horacio Verbitsky.
Frente a esas sospechas, en el oficialismo buscan instalar la idea de que se trató de ilícito del que participaron solo un par de personas, entre ellas el entonces ministro de Salud, y aseguran que no existía ningún «vacunatorio VIP», así como que tampoco había 3.000 dosis de la Sputnik V a disposición de estos mecanismos paralelos.
«Hablo seguido con los militantes y hay una sensación de decepción por lo que pasó. Hay que pedirle perdón a la sociedad», sostuvo en declaraciones radiales el ministro de Defensa, Agustín Rossi.
Por ahora, recién se conocen las primeras repercusiones de lo sucedido y en el Frente de Todos, según funcionarios la apuesta será mostrar a partir de ahora una «transparencia total» en todas las listas de vacunación.
Asimismo, se comenzará a trabajar también en buscar que los actores municipales y provinciales rindan cuentas respecto a las dosis que reciben, ya que el sistema no está correctamente centralizado.
Durante el fin de semana se evaluó incluso trabajar en una ley del Congreso para establecer el mecanismo de distribución de las vacunas y también para crear un órgano de administración y control de las mismas, pero por ahora quedó descartada debido a que lo primordial es vacunar con mayor celeridad.
