El Tribunal Oral Federal 8 comienza mañana el juicio oral y público contra Maximiliano Romero, el denominado «patrón de la efedrina» o «el fantasma», y a otros tres acusados de haber importado esa sustancia para producir drogas sintéticas en el país.
Son tres causas en un único juicio que se hará vía remota y en donde se los acusa de narcotráfico al haber importado la efedrina, en su mayoría desde India, para producir en el país drogas sintéticas para luego desviarlas hacia México.
Entre 1999 y 2010 se importaron 56 mil kilos de efedrina de los cuales 44 mil lo fueron en los últimos dos años, lo que evidenció un incremento importante, y si bien eran personas físicas o laboratorios quienes importaban, se sospecha que la sustancia fue derivada a personas investigadas o condenadas por narcotráfico.
Cinco personas jurídicas ((Droguería Chutrau S.A.C.I.F.I.A; Droguería Saporiti S.A.C.I.F.I.A; Droguería Libertad S.A; Farmacéuticos Argentinos S.A; Unifarma S.A. y Guillermo Raúl Ascona) y una física (Guillermo Ascona) figuran como los importadores, pero la sustancia terminó en manos del narcotráfico.
«La totalidad de la efedrina adquirida por la organización tenían como destino su desvío a los canales de narcotráfico de los Estados Unidos Mexicanos, siendo que los integrantes de la estructura superan el centenar de movimientos migratorios entre México y Argentina, los que fueron en forma constante y por lapsos de estadía muy breves», según consta en la investigación.
Junto a las maniobras de narcotráfico también se investiga el delito de lavado de dinero, ya que se sospecha que patrimonio que los acusados integraban al sistema legal provenía de las ganancias obtenidas con la venta de efedrina al narcotráfico para la producción de drogas.
